6 Señales De Que Podrías Sufrir Un Infarto

Alrededor de 750 mil personas sufren ataques al corazón anualmente sólo en Estados Unidos, lo que provoca que sea la mayor causa de muerte en el país del norte.

Sin embargo, ¿sabías que tu propio cuerpo puede entregarte señales de alerta antes de sufrir un ataque de esta naturaleza?

De hecho, según estudios de la Universidad de Harvard, una de cada cuatro personas que sufre un infarto no ha experimentado ninguna señal previamente. Por lo tanto, estar bien informado nos puede salvar la vida. Si experimentas uno o más de estos síntomas, consulta a un médico lo antes posible.

 

1.Cansancio

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Si tienes días activos o falta de sueño, estar cansado es algo natural. De hecho todos nos cansamos ocasionalmente. Pero si quedas agotado luego de hacer actividades simples (como subir escaleras o caminar un poco) puede ser señal de que tu corazón no recibe el suministro sanguíneo adecuado, lo que podría llevar a un infarto al miocardio.

 

2.Presión en el pecho

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Una señal muy común de alarma es una intensa presión en el pecho que puede estar acompañada de síntomas como latidos acelerados o dolor en el pecho, la espalda, mandíbula, cuello, brazo o la parte superior del abdomen.

 

3.Sofoco

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Si te cuesta respirar al hacer un esfuerzo moderado o ligero, puede que tu corazón no esté transportando suficiente oxígeno a tus pulmones probablemente gracias a una arteria bloqueada.

 

4.Letargo

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Cuando tus músculos no reciben suficiente oxígeno, te empiezas a sentir débil y sin energía. Esta suele ser la primera señal de un ataque al corazón.

 

5.Mareo y sudor frío

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Generalmente los mareos son provocados por falta de oxígeno en el cerebro, por lo que deberías consultar a un médico de inmediato. El excesivo sudor, cuando lo acompaña, puede ser una señal temprana de paro cardíaco también.

 

6.Gripe o resfriado

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La tos ayuda a incrementar tu flujo sanguíneo, así que síntomas parecidos a la gripe o el resfrío pueden aparecer un mes antes de un infarto como respuesta natural de tu cuerpo por evitarlo.

 

Así que ya sabes, ¡a detectar los síntomas y a ponerse en manos de profesionales!

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