Aunque existe la errada creencia de que todos los perros y los gatos son incompatibles y viven en constante conflicto, a lo largo del tiempo hemos comprobado que pueden vivir en perfecta armonía si se les dan los espacios para que ambos se desenvuelvan sin alterar la dinámica de unos y de otros. Quienes conviven con ambas mascotas podrán asegurar que, sin lugar a dudas, pueden ser los mejores compañeros en el hogar.
Sin embargo, no podemos negar que los felinos son animales bastante más independientes que los canes y no muestran demasiada empatía a la hora de lograr lo que desean, si quieren dormir sobre el computador mientras estás trabajando, lo harán, si quieren jugar cuando quieres dormir, no lo pensarán dos veces y cuando se trata de dormir cómodos aunque sea en una cama ajena, no hay nadie quien los detenga.
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