Jeff Longo encontró a esta ardilla voladora recién nacido sobre la ardiente acera de una calle de Florida. Estaba prácticamente muerta pero de todas maneras se la llevó a casa.
Todos le dijeron que sería muy difícil hacer que se recuperara; sin embargo, gracias a la dedicación, cuidados y cariño recibidos, ahora Biscuit, como la llama su padre adoptivo, es un miembro más de la familia.
No se sabe porqué esta pequeña se separó de su madre pero podemos asegurar que de no ser por Jeff, esta pequeña jamás habría sobrevivido. Ahora, Biscuit, es una ardilla feliz que adora corretear por todas partes de la casa y usar a su padre como árbol.
Una vez se escapó y la encontraron dentro de la bañera durmiendo.
Este tipo de ardillas son animales acostumbrados a vivir en los árboles y de hábitos nocturnos pero Biscuit se tendrá que acostumbrar a su casa adoptiva porque no sería capaz de sobrevivir en la vida salvaje.
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