Ser padres es la tarea más difícil a la que debemos enfrentarnos en la vida y con las mejores intenciones, se les aconseja eternamente sobre lo que deben y no deben hacer para ser felices en su vida de acuerdo a los valores que son importantes como familia.
Sin embargo, muchos de los consejos que damos como padres no son necesariamente prácticos en la vida real y se traspasan de una generación a otra por que la literatura lo establece, porque alguien nos dijo y consideramos que era una buena enseñanza, sin mayor análisis del contenido. Acá les mostraremos 6 consejos que pueden estar un tanto alejados de la realidad.
1.- No le debes nada a nadie.
Existe una responsabilidad común: ser parte de los cambios positivos en el mundo. Si no eres parte de ello estás oponiéndote. Le debes a alguien (incluyendo a ti mismo) un poco de amabilidad, misericordia, paciencia, respeto y empatía. Cada cual se encuentra enfrentando sus propias batallas, cada cual tiene un capítulo en su vida del que no quiere hablar. Puede que necesites dar un paso al frente, en medio de la batalla de otro, mientras lucha por mantenerse firme, si nada se puede hacer; tú puedes ayudar mostrando un poco de amabilidad.
2.- El respeto se gana no se impone.
Esto es similar a “¿Qué vino primero, el huevo o la gallina?”. ¿Debes esperar a que alguien se gane tu respeto antes de que lo respetes? ¿Deberíamos asumir que nadie nos respeta hasta que nos hemos ganado ese “privilegio”? Si no te has ganado el respeto de la gente, ¿Deberías ser irrespetuoso con todos? Tú eres responsable de la forma en la que te comportas sin importar si el otro es respetuoso o no, por lo tanto, respeta a los demás.
3.- Sé tu mismo y las personas sabrán lo talentoso, inteligente y adorable que eres.
Haz que se note tu presencia. Aprende a saber cuando acercarte y cuándo retirarte. Si no preguntas la respuesta siempre será “no”. La persistencia, la humildad y el esfuerzo te ayudarán a brillar y avanzar en la dirección que te convertirá en un ser humano productivo.
No esperes andar flotando por el mundo y obtener lo que quieres solo por ser como eres. A veces tendrás que esforzarte mucho para que alguien se fije en ti.
4.- El trabajo duro trae sus recompensas.
Sin embargo, no siempre es así. Ocasionalmente el trabajo duro y los grandes esfuerzos producen los resultados más desastrosos: nada. La vida puede ser injusta y de igual forma debes trabajar duro porque sin trabajar no se consigue nada.
5.- Tienes que perseguir tus sueños para que seas feliz.
Encuentra a 15 personas y pregúntales si tienen el trabajo de sus sueños. Después pregúntales si son felices en su vida. Las respuestas te sorprenderán. No todos necesitan un trabajo maravilloso y gratificante para ser felices en la vida. Algunos trabajan en al área de su elección, haciendo exactamente lo que siempre quisieron hacer y son miserables. Algunas personas casi no tienen un “trabajo” y aún así viven felices. Otros adoran su trabajo pero esperan algo mejor en su vida personal. Persigue tus sueños pero mientras sé una persona productiva. En ocasiones, trabajar duro es más gratificante que tener 30 años y seguir esperando el trabajo perfecto. Asegúrate de ganarte la vida incluso si nunca llegas a encontrar el trabajo de ensueño.
6.- Tú eres especial.
No eres mejor ni peor que nadie en este mundo. Cada persona que conoces es mejor que tu en algo. Cada persona que conoces lucha por algo que para ti es sumamente fácil. Utiliza tus fortalezas para hacer este mundo mejor, un lugar más agradable (cuando es mejor para los demás, es mejor para ti también). Pide y acepta ayuda cuando la necesites. Nunca creas que alguien o algo es mejor o peor que tú.
Fuente: huffingtonpost
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