Creyó que él era el amor de su vida pero sería su fin.
Una de las voces más privilegiadas del mundo. Entregaba su alma en el escenario al interpretar con pasión melodías del jazz, soul, ska y R&B.
Cantante y compositora, Amy fue una de aquellas estrellas que partieron antes de los 30 debido a sus adicciones.
Unas de sus adicciones fue la cocaína que la llevó por un camino sin retorno. También disfrutaba fumar pipas con crack y eran frecuentes las fotos donde aparecía con restos de cocaína en la nariz. Ya a los 23 años tuvo una sobredosis dejando claro a lo que iba a llegar si no hacía un cambio.
Pero también tuvo otra adición mayor, al mal amor.
Se enamoró del hombre equivocado, aunque en el estado en que se encontraba, hubiera caído en cualquier agujero negro de perdición.
Buscaba desesperadamente la aprobación y la seguridad del otro y, por eso, se empecinó en hacer feliz a su pareja a costa de sí misma.
Su adicción a este amor la llevó a unas crisis personales y profesionales muy fuertes que la llevaron a consumir drogas mucho más fuertes, en mayor cantidad y frecuencia.
Con una relación basada en constantes peleas y decepciones, las drogas adictivas como la marihuana, la heroína y el alcohol llenaron el vacío que sentía.
Un hombre sería su perdición
Muchos aseguran que fue Blake Fiedler-Civil quién la introdujo en ese mundo oscuro de la adicción a las drogas.
Se conocieron en Londres en 2004 y se dice que la atracción fue inmediata. Después de un año de relación, él la abandonó y Amy cayó en una fuerte depresión que la llevó a sufrir un incontrolable trastorno alimenticio.
Justo en ese período grabó “Black to black”, su más grande éxito, pero al mismo tiempo era el inicio de su despedida.
La fama llegó a su vida, pero su corazón seguía roto. Blake quiso retomar la relación y en 2007 decidieron volver. Después se casaron y, en ese minuto, Amy ya había firmado su sentencia de muerte.
Ni él ni ella pudieron lidiar con la inestabilidad de la cantante. La relación se volvió dependiente, destructiva y enfermiza; la pareja no aceptaba sus errores personales.
Según Blake en una ocasión mientras discutían, él terminó con algunos cristales rotos en su piel. Y ella, para demostrar su amor, se clavó algunos también.
Amy Winehouse creyó encontrar el amor verdadero pero esa sería una de sus peores decisiones y todo terminó mal.
¿Qué opinas de su vida?
